Botones de colección

Hace ya algunos días que tenía atrasado editar este artículo, pero lo que son las cosas, a veces es un " querer y no poder " . Pero finalmente saqué unas fotos a estas maravillas.
Es habitual encontrar de vez en cuando algún post dedicado a los útiles de costura , productos de mercería y labores antiguas, en este blog. Y es que poquito a poquito he ido haciendo una " pequeña " colección de todos estos tesoros que andan " sueltos por el mundo " . Por eso, Eva desde Utiel no dudó en enviarme generosamente algunos botones de las mercerías centenarias de su ciudad, de esas que andan escondidas en pueblecitos y que son atendidas por señoras que lo mismo te cuentan cómo hacer un ribete que te rebuscan entre sus cajas el botón que justo necesitas.

¡ Ha sido más de lo que yo me imaginaba !
¿ Cómo has podido desprenderte de estas preciosidades ? A mí realmente me hubiese costado y tú lo has hecho de corazón ¡ Qué cariño respira tu carta ! ¡¡¡¡¡¡¡ Gracias Eva , realmente estoy aún emocionada!!!!!!!!

Los de pasamanería son muy antiguos y hechos a mano








Mirad qué cosa más bonita.¿ Están pintados a mano y son de los años 40!




La inquietud de Eva le llevó a montar su propia exposición en la Casa de la Cultura de Utiel. Éxito total para una joven mujer que disfruta bordando como muchas de nosotras. El valor de lo tradicional " que no está pasado de moda ".

Eso hay que tenerlo claro . Y es que a pesar de que muchas mujeres se ven como " bicho raro " entre los y las que la rodean , sólo por tener una afición que algunos dirían " de abuelas " , en realidad están sacando a flote una tradición que cada vez cala más en la gente joven . No hay más que ver los anuncios de coleccionables que nos sacan por la televisión de vez en cuando.
No me siento avergonzada por ponerme a coser en medio de una piscina o de un parque , o en el coche mientras un camionero que pasa nuestro lado , ladea la cabeza y con una expresión de asombro me ve con aguja en mano. Claro que he sentido miradas de curiosidad y a veces hasta me han preguntado qué traía entre manos ¿ y qué ? Yo a lo mío.

Por eso , después de leer la extensa carta de Eva, he reflexionado y querido que este artículo sirva también de bandera por todas nosotras, que amamos lo que nuestras madres, abuelas, hermanas o amigas nos descubrieron un día y ahora intentamos también hacerlo con nuestras hijas.
De vez en cuando no viene mal recordarlo .